1. Protección marcas nacionales y nombre comerciales
La marca es un signo distintivo que identifica en el mercado los productos o servicios de una empresa y los diferencia de los de sus competidores, siempre y cuando sea representado de tal manera que se pueda determinar el objeto claro y preciso de la protección otorgada a su titular.
Podrán constituir marcas todos los signos, especialmente las palabras, incluidos los nombres de personas, los dibujos, las letras, las cifras, los colores, la forma del producto o de su embalaje, o los sonidos,
El nombre comercial identifica a una empresa en el tráfico mercantil y que sirve para distinguirla de las demás empresas que desarrollan actividades idénticas o similares.
El derecho sobre la marca se adquiere mediante su registro ante el organismo competente y otorga a su titular un derecho de exclusiva, así como la posibilidad de impedir a terceros el uso de una marca idéntica o similar que genere confusión en el tráfico económico o busque un aprovechamiento indebido.
Por ese motivo es fundamental otorgar la debida protección a las marcas como uno de los mayores activos intangibles de las empresas.
Nuestra firma ofrece un asesoramiento integral para la defensa y protección de las marcas, contando para ello con un equipo de profesionales que le ayudarán a proteger sus derechos de propiedad industrial. Entre los servicios que ofrecemos, podemos destacar:
2. Protección marcas en el extranjero
Mediante el registro de una marca de la Unión Europea, obtenemos protección en los siguientes países: : Finlandia, Suecia, Dinamarca, Irlanda, Reino Unido, Alemania, Austria, Benelux (Bélgica, Holanda y Luxemburgo), Italia, Grecia, Francia, Portugal, España, República Checa, Chipre, República Eslovaca, Eslovenia, Estonia, Hungría, Letonia, Lituania, Malta, Polonia, Bulgaria, Rumanía y Croacia.
El órgano encargado de todo lo relativo a la solicitud y registro de las marcas de la Unión Europea es la EUIPO (Oficina de Propiedad Intelectual de la Unión Europea).
La duración de la marca europea es de 10 años desde la fecha de solicitud, renovable por periodos idénticos indefinidamente.
La marca de la Unión Europea se considera usada con su utilización en al menos uno de los países miembros de la Unión Europea.
El titular de una marca europea obtiene el derecho en exclusiva sobre la marca registrada, legitimándole para impedir que un tercero registre o utilice una marca susceptible de crear confusión con la suya en cualquier país de la Unión Europea.
El Sistema de Madrid de registro internacional de marcas se rige por el Arreglo de Madrid, adoptado en 1891, y el Protocolo concerniente a ese Arreglo, adoptado en 1989. Este sistema permite proteger una marca en un gran número de países mediante la obtención de un registro internacional que surte efecto en cada una delas Partes Contratantes que hayan sido designadas.